HOMBRE MASA |
ARTURO VON VACANO |
"Hombre Masa", Novela de Ideas Los Cuadernos de Pepecito Torres, el Hombre Masa Factor dominante durante su siglo es el Hombre Masa, pero nadie conoce a la bestia del billón de caras, el nuevo señor del mundo, la chusma. La única opción de las elites ante las masas triunfantes desde su rebelión es un pánico que obedece todos sus caprichos: nada es muy caro ni absurdo cuando se trata de apaciguar a las muchedumbres. Insano, hambriento y feroz, el populacho cubre el planeta como una tiña, lo destruye y lo devora; es marabunta que derivará en el canibalismo. Dueño de todo, nada conoce; se debate en océanos de sílabas sin sentido, esa ignorancia ilustrada de los demagogos del saber, los especialistas. Ciego y violento, el vulgo rige; la multitud se impone y la plebe indica el futuro: lo niega. Su triunfo se confirma en la evidencia de que todos somos ese Hombre Masa. Y es la víspera ya del fin del mundo: percibimos que todo le fue dado pero perdió la esperanza. Nunca hubo evangelio sencillo que aliviara sus feroces necesidades. Hasta el advenimiento de Pepecito Torres y sus Cuadernos. Pepecito Torres es el Odiseo plebeyo que busca su estrella entre textos recortados, imágenes inconexas y resúmenes televisados mientras sobrevive a prisa y sin pausa para destilar su duda y sublimar las verdades que anhela; pero así articula su cosmología de modo sencillo y establece el sendero que cruza todas las coyunturas. Universo único que habita el material, Pepecito Torres ha dado con la Solución de Todo al explorar ambos universos desde la singularidad del Yo hasta el fin de la eternidad. Soluciona su Yo, desfila por su lar patrio, atisba y condena el Imperio que le oprime, abre senda hasta su Creador y armoniza su Milenio. Universo habitado por criaturas sempiternas, halla la esencia de sí mismo en un "sufro, ergo soy" que deriva en nuestro sino fatal y común de condenados a la felicidad. Descubre luego la justificación de su especie en la capacidad única por humana de fundir el bien y el mal en el Innombrable que la pensó para amarla, y todo lo anota en su Primer Cuaderno. Lastimado hermano de los pobres, corre luego la vista por la cuna que le diera el azar para hallarle sentido y razón. Devela un designio horroroso y la suerte común de todas las naciones, pero receta en su Cuaderno Segundo con una frase simple la senda de felicidad y libertad que se ofrece a miles de millones de víctimas azoradas que comparten su agotado planeta. Turista forzado del Imperio que asola el universo material, su Cuaderno Tercero expresa una condena al demostrar falsas las ciencias y religiones que convergen para exterminar sin pausa a esclavos y otros excedentes mientras la historia cierra un Progreso demente. Solucionados los problemas del "Yo", del "Nosotros" y del "Los Otros", su Cuaderno Cuarto encuentra que el Maestro de Occidente nunca fue cristiano, fracasó en su misión y tanto le amaron sus discípulos que tergiversaron sus palabras porque prefirieron el dominio temporal del mundo; pero también que Jesús vive y camina con cada quien que le nombra. Hijo de sus tiempos, Torres dedica su Cuaderno Quinto a su enemigo declarado, el sufrimiento humano, y busca y define entre los pasos del Ungido las tareas que deben cumplirse para concluir el Plan de Dios, aplicar a los universos la Solución de Todo e iniciar el Milenio que el Salvador concibiera: su Gloria realizada para goce de todos. |
Arturo |
Su Opinión |